El Síndrome de la Apnea-Hipoapnea Obstructiva del Sueño (SAHS), o también conocida con las siglas SAOS, es una enfermedad muy frecuente, que afecta a un 4-6% de los varones y a un 2-4% de las mujeres en la edad adulta. En el SAHS, tal y como explicamos en un post ("Síndrome de apnea del sueño") en este blog, se produce una obstrucción en el paso de aire en la vía respiratoria alta (apnea) provocando síntomas como excesiva somnolencia diurna, cansancio, sueño no reparador, cefaleas matutinas, deterioro cognitivo, depresión, nicturia, etc. además de ronquido nocturno y pausas nocturnas de la respiración.
Con cada apnea, el oxígeno en la sangre desciende, lo que puede generar trastornos cardio-respiratorios (enfermedades que afectan al corazón y al pulmón); entre ellas, puede ser causa de hipertensión arterial (HTA). La asociación entre SAHS y HTA está bien documentada, especialmente en presencia de HTA nocturna. El SAHS parece ser causa de una gran proporción de casos de aumento de la presión arterial o de la ausencia de una reducción de la presión arterial durante el descanso.
El tratamiento inicial del SAHS incluye medidas higiénico-dietéticas como pueden ser dejar de fumar, evitar el sobrepeso, mantener una higiene adecuada del sueño, eliminar las bebidas alcohólicas y estimulantes, especialmente las horas previas al sueño, evitar cenas copiosas, adoptar una posición corporal correcta durante el sueño, etc.
Para el tratamiento de los casos más graves de SAHS o con factores de riesgo laboral o vascular, en los que las medidas higiénico-dietéticas no son eficaces, estas se complementan con la utilización de la CPAP. Las siglas CPAP quieren decir Presión Positiva Continua en la Vía Aérea. La CPAP es un aparato que sopla aire, es decir, proporciona aire a una presión continua. Este aire suministrado a través de las fosas nasales, hace que la vía respiratoria del interior del cuello (faringe) se dilate y se mantenga abierta siempre, evitando que se produzcan paradas respiratorias (apneas) mientras duerme.
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), a través de la iniciativa Año SEPAR 2014/15 del Paciente Crónico y las Terapias Respiratorias Domiciliarias ha impulsado la Guía para Pacientes con CPAP. Esta guía se dirige al paciente que usa la CPAP como tratamiento del SAHS para que de una forma sencilla, clara y directa, pueda comprender en qué consiste el tratamiento, cuánto tiempo debe usarlo, qué cuidados debe tener en el día a día y cómo resolver algunos problemas que puedan surgir.
Desde Blog del Hipertenso os recomendamos esta guía, como complemento a las recomendaciones que vuestro médico de referencia os haya podido explicar.
Fuentes consultadas:
- Guía para pacientes con CPAP (2014)
Gracias @txemacoll por ponernos tras la pista de esta guía a través de tu tuit :)
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